EVOLUCIÓN TV

Evolución.

El 28 de octubre de 1956 comenzaron oficialmente las emisiones regulares en España. Durante casi tres años TVE fue una televisión local con ámbito de cobertura limitado exclusivamente a la ciudad de Madrid.

Hasta 1959 en España no se produjeron televisores. Eran un producto de gran lujo que había que importar desde el extranjero, y accesible por ello únicamente a una reducidísima minoría de la población.
Los españoles también fueron cambiando sus ideas sobre la televisión. A la altura de 1966 el aparato televisivo ocupa en las encuestas oficiales un discreto séptimo lugar en los deseos de posesión de bienes de consumo en las ciudades y nada menos que un duodécimo en las localidades rurales.
A partir de primeros de los años sesenta, los poderes públicos se plantean políticas para incentivar el consumo y potenciar la penetración del medio en la sociedad.
En la segunda mitad de la década de los años sesenta, es cuando los españoles han legitimado a la televisión como su principal forma de ocio, TVE vive su particular edad de oro.
No hay que olvidar que esto también se debió a la transición democrática española y comienza a ver una libertad de expresión y de contenido en ésta.
Hay que nombrar a tve2 que nace en 1965, y que va tomando protagonismo como una cadena pensada para las audiencias culturalmente más exigentes; por su parte, la primera será la cadena de los programas más populares.
En esta Transición se trató de elaborar, a partir de la producción de series, una política pedagógica de los nuevos valores democráticos.
Fueron destacadas las series documentales y pedagógicas que se hicieron como Fiesta o Rito y geografía del cante, los programas de base musical como Ultimo grito o Popgrama. No olvidamos los espacios de arte y literatura, o ya en los años ochenta, tiempo que hemos denominado como edad de plata de la segunda cadena, La bola de cristal, La edad de oro y Metrópolis.
Todos ellos consiguieron un prestigio, entre social y cultural, que llega hasta hoy en día y que los comentaristas recuerdan como un verdadero paraíso perdido’ de la estética televisiva.

Sin embargo, lo más significativo siempre es la producción propia española.
Los programas de variedades, en su mezcla de actuaciones musicales y pequeños números de humor, usualmente se programaban en la noche de los viernes o en la de los sábados. Ayer como hoy tendencialmente eran presentados por una pareja de hombre y mujer.
En un segundo bloque encontraríamos los concursos de preguntas y respuestas, pero también los programas divulgativos como los de Félix Rodríguez de la Fuente o los infantiles.
Y sobre todo la ficción propia como Novela de treinta minutos de duración por capítulo a lo largo de una o más semanas programadas después del telediario del mediodía o antes del de la noche.

En la década de los 90, y con una enorme repercusión en el mercado televisivo español, fue la aparición de tres televisiones privadas de cobertura estatal. Antena 3 y Tele 5, que iniciaron sus emisiones en diciembre de 1989; y una tercera de pago, Canal + que comenzó su programación en septiembre de 1990, codificada en lo más significativo de su emisión pero con varias horas en abierto y también con una programación de tendencia generalista.

En esta etapa comienza el funcionamiento del sector (emisoras e industrias publicitarias) a partir de los datos de audiencia que proporciona la empresa de audiometría SOFRES.


Antena 3 apostó por la producción propia de ficción de telecomedias y consiguió un éxito que modificó el hilo conductor de la televisión en los años noventa: Farmacia de Guardia, Compañeros. Etc. También Antena 3 fue la primera cadena de televisión que emitió un debate entre los dos candidatos a la presidencia de gobierno (Felipe González, José María Aznar, 1993).

Tele 5 en la primera época dejó en fuera de juego las maneras de TVE 1. En una segunda etapa Tele 5 ha sido reconocida por series como Médico de Familia, Periodistas, Al salir de clase o Siete Vidas y por su insistencia en diversos programas basados en el formato del reality show, sucedáneos todos del original Gran Hermano.

Por su parte Canal + ha permanecido bastante estable en los diez últimos años. Su modelo de emisora está basado en producción ajena (largometrajes, retrasmisiones deportivas o series) pero ha conseguido una cierta notoriedad por las innovaciones de la realización de sus retrasmisiones, por sus piezas promocionales y por el magazine deportivo El día después.

La televisión en España ha cambiado drásticamente en la última década. Puede decirse que hace diez años primaba una lógica denominada servicio público, que a grandes rasgos definiríamos como aquella en la que destacaba el deseo de incidir cultural o políticamente en la audiencia.
Ahora, el criterio básico consiste en programar lo que el público pretendidamente demanda y tiene interés en consumir. Se trata de buscar en todos los casos el mayor número de audiencia. Actualmente, los programas van dirigidos a los grandes consumidores de televisión. Se abandona por tanto el deseo de crear una dieta equilibrada para todos los segmentos sociales y llegar al máximo de público disponible en cada franja horaria. Por este motivo han desaparecido de las parrillas o han sido enviados a horarios muy marginales de las televisiones generalistas muchos géneros o programas parcialmente minoritarios como el cine en blanco y negro o los programas infantiles de la tarde.

El efecto más evidente de lo dicho es que la oferta televisiva de la última década se ha inclinado hacia los gustos e intereses de los grandes consumidores estadísticamente hablando: personas mayores, de clases bajas y zonas rurales.

En el siguiente enlace podemos ver un estudio realizado por la Universdiad de Navarra sobre la televisión española en el año 2009.
http://www.uteca.com/uteca_contenidos/documentos/01_UTECA_ALFONSO_SANCHEZ_TABERNERO.pdf